Demasiada verga para esta bella dama

A Laney Grey se le cumplió una de sus fantasías, que tenga un amor así como pasó en el Titanic con Jack y Rose, aunque la realidad suele ser más brutal que la fantasía, ella salió a lanzar escupitajos por la borda de ese crucero y se encontró al viejo Charles, un veterano de guerra que por momentos tiene ataques de locura, al verse ambos a los ojos sintieron amor real, fueron a la recámara de la jovencita dulce porque ella quería aprovechar para que se la revienten así como en la película, pero cuando empezó a mamar la bazuca de este viejo ya era demasiada carne la que tenía en la boca, mejor se puso de espaldas para una penetración más correcta, más disfrutable.