La comadre se embute mi chorizo mientras mi esposa duerme en la sala de la casa.
Mi mujer tiene problemas con el alcohol bien cabrones, y mi comadre se ha ido acercando cada vez a mí que disque para ayudarme a superar las dificultades con la borracha de mi mujer. Pero las viejas saben lo que hacen, ya que la gordita tenía un plan entre manos. Un día que mi mujer estaba desmayada de borracha en medio de la sala, la comadre me propuso que entre los dos nos chumaramos lo que quedaba de alcohol en la casa. Como era un chingo, quedamos bien pedos y se acabaron las inhibiciones, antes de darme cuenta de lo que hacía ya mi verga se deslizaba dentro de la comadre justo enfrente de mi esposa, que dormía roncando a un ladito de nosotros.